viernes, agosto 05, 2011

Yo era la chica de 5.3 pies de alto.

Todos los niños y niñas introvertidos tuvimos ese amor alguna vez que no pudimos expresar, que nos dejaba sin habla y como sin ideas, y si alguna vez nos atrevíamos a retar el poder de ese descontrol, terminábamos diciendo sinsentidos al final de un recital, y ellos sólo decían "gracias" y uno no sabía interpretar su gratitud, sólo deseaba desaparecer… YA.

No sé si soy yo o es lo normal… pero siempre que escucho de él, siempre siempre aunque no esté interesada o no sienta lo mismo que antes, quiero saber más. Han pasado años, tantos como cinco, y yo era tan tonta (no que ya no lo sea), que puedo asegurar que no he tenido una conversación con él desde que lo conocí y me apena.

Qué será? Será el "si hubiera sido"? No lo sé, pero me mata de curiosidad hablar, me pone nerviosa la idea, y simplemente no lo hago. Y mientras escribo que no lo hago, en mi mente resuena un "nunca lo haré" muy quedo, pero firme.

Pienso en la persona que soy hoy. Sé que si hubiera hablado con él… me da pena admitirlo pero creo que lo hubiera hecho parte de mi vida. Pero no fue así y yo ya empecé a construir una vida en la que él no es más que una actualización de estado que no puedo ignorar, constantemente. No estoy enamorada, debe ser… curiosidad?

Pienso en la persona que soy hoy! Y en la persona que apenas miro de lejos si es que me atrevo y pienso en su pasado y pienso en mi pasado y pienso de nuevo en quienes somos hoy y no tengo idea de qué pensar después y sé que no me hago presente en su vida y cuando no te haces presente en la vida de alguien puedes no ser nadie. O ser alguien si a pesar de hacer nada de ti esa persona hace mucho de lo que recuerda, de la apenas sugerida personalidad que tenías al menos por el chat.

Pero no soy divertida, no soy a quien la gente acude para reír un rato. Yo no lo hacía reír pero tampoco soy tan interesante, tampoco leo tanto porque leo sobre todo para entretenerme y empaparme de emociones; no tanto para adquirir conocimiento estructurado ni para justificar mis ideas ni para conversar como conversan los que así hacen.

Si hablara con él no lo haría buscando nada pues no busco nada más que relaciones fuertes, amistosas o de cualquier tipo. Y él como un corazón que palpita casi tan lento como el universo, va y viene mientras mi corazón late como el de un colibrí y cada miles de latidos pienso en él pero cada miles de latidos no es casi nada para un colibrí y me hallo recordándolo constantemente, y diciendo mientras pienso en mi pasado que no sé qué más pensar.

Como un vacío, un abismo entre él y yo y nada nos une sino recuerdos de lo que no fue mientras yo intento hacer algo de mí y él ya es tanto con sólo abrir la boca. Lo admiro y le conozco defectos y no quiero pensar en él solo porque no hay nadie pero aún si hubiera alguien él seguiría siendo como siempre que hay alguien. Quiero hablar con él porque la última vez que pensé en hablarle pensé que no era buena idea por respeto a alguien más aunque no buscara más que amistad.

Hoy no quiero encontrar al amor de mi vida, sólo quiero descartar posibilidades y vivir un poco más, tan bien como se puede vivir… queriendo siempre a las mismas personas.

No hay comentarios.:

tags

anuncios (16) arte (68) comida (25) como diario (2) crafts (5) dark side of the blog (12) dewa (44) did.myself (13) diseño (41) dreams (1) el-o-vi-i (41) escritos (36) estilo (1) familia (16) fashion (70) Fausto (10) fotos (130) Kirei Tsukino (17) links (50) literatura (7) moods (69) música (57) otakubako (21) parenting (7) personal issues (17) proyectos (25) quotes (11) random (20) recetas (12) tutoriales (4) universidad (9) vegan (1) viajes (6) video (36) wishlist (23)